Pascal Quignard: Eochaid
25 de febrero de 2014
El primer rey que reinó en Irlanda se llamaba Eochaid y fue
apodado Feidleach. Su pueblo creía que le apodaron Feidleach porque
era feidil, que quiere decir justo. Pero el sobrenombre tenía un
significado muy distinto.
Antaño Eochaid tenía cuatro hijos. Cuando llegó a viejo sus
cuatro hijos se aliaron contra él. Lo enfrentaron en el santuario de
Druim Criach. Primero Eochaid intentó concluir una tregua con sus
hijos. Pero sólo el más joven aceptó y abandonó Druim Criach, no
queriendo combatir contra sus hermanos. Los otros tres rechazaron el
acuerdo. De inmediato Eochaid maldijo a sus tres hijos, diciendo:
-¡Que sean iguales a su nombre!
Entonces Eochaid libró la batalla y mató a siete mil guerreros,
pese a no tener más de tres mil hombres a sus órdenes. Sus tres hijos
cayeron en la batalla. Luego -habiendo sido decapitados los tres- las
tres cabezas fueron llevadas a Druim Criach antes de que finalizara el
día. Eochaid las miró y no dijo nada hasta que llegó la noche y sumió
a los cuatro (los tres hijos y el padre) en la oscuridad. De allí viene el
sobrenombre Feidleach, que significa fedil uch, largo suspiro, porque
después de que sus hijos fueron muertos en la batalla de Druim Criach la
tristeza jamás abandonó el corazón del rey.
Ningún guerrero dudó del sufrimiento que el rey sintió ante las
cabezas expuestas a su mirada. Todos lo admiraron, porque el rey no
se había desembarazado de su dolor.
Se le apodó Largo Suspiro porque no había emitido la menor
queja.
*
Decir es perder.
Deseó guardar a sus hijos en su corazón.
Gruta nocturna, hocico animal, boca humana son lo mismo.
Sala de pinturas, sala-máscara, sala de iniciación, sala caníbal,
sala vedada, sala secreta son lo mismo.
*
El dolor que Echoaid sintió en el crepúsculo que siguió a la
batalla de Druim Criach (cuando la noche empezó a caer sobre las
cabezas cercenadas de sus tres hijos) jamás salió de su boca. Ni al
morir. Ni siquiera en el instante de su muerte.
*
Largo suspiro porque lo contuvo hasta el país de los muertos,
donde se reunió con ellos.
*
Toda la música europea del siglo diecinueve -suerte de antónimo
del rey Echoaid- es un largo suspiro que desborda los labios, un
inmenso suspiro desparramado, un sollozo sin fin que no disimula,
que suelta todo el dolor hasta el punto de llamarlo y amarlo.
Denomino música romántica europea a la que fue escrita entre mil
setecientos ochenta y nueve y mil novecientos catorce. Música que se
ha convertido en integralmente inaudible, sentimental, escandalosa,
ahora planetaria, multiplicada eléctricamente, esencialmente belicosa.
Las lágrimas de la nostalgia por el lugar ancestral caen de los ojos de
Fréderic Chopin, de los de Richard Wagner, de los de Giuseppe Verdi.
¿Qué inventó la Europa romántica? La guerra espantosa. El
nacionalismo fue la gran reivindicación de los románticos y lo
concibieron cual un derecho a la guerra considerada feidil, es decir
justa.
La leyenda de los reyes de Irlanda dice que feidleach no quiere
decir justo sino fedil uch, largo suspiro.
De pronto, los románticos definieron la guerra como una
liberación.
Fragmento de "Res, Eochaid, Eckhart"
El odio a la música (Octavo Tratado)
Título de la edición original: La Haine de la Musique
Traducción y notas de Pierre Jacomet
Santiago de Chile, 1998
Foto: Manuel Braun