Amelia Biagioni: San Simeón el Estilita
22 de diciembre de 2016
Por un ansia del mundo brota
la montaña de Telanissa
y sobre la montaña la columna
—cuarenta codos—
que alarga Simeón signo.
Cuarenta espadas o años
sin comer
sin dormir
—ni con el pensamiento—
siempre de pie en la penitencia
—sólo un bastón
para apoyar su sombra—.
Cuarenta salmos o años
celebrando
no con palabras:
con el crepúsculo hacedor
del día y de la noche
con los astros de mirra
y el espacio capaz de soportarse
fuego hielo ciclón diluvio
y con el buitre misericordioso.
Cuarenta aureolas o años
perseverando
en el cénit
en el milagro
contemplando y oyendo
no con ojos
no con oídos
entrando arriba
por gravedad
y sin saberlo por asalto
de amor
en el misterio
mientras el cuerpo
se le va
desmoronan-
do ver-
tical
has-
ta
mo-
rir.
Cuarenta combas o años
de firmamento en ansia
que exhala a Simeón rayo columna ardiendo
que se prolonga piedra
que alcanza a la montaña de Telanissa
que penetra en el mundo misterioso.
En El humo
Buenos Aires, Emecé, 1967
Foto: AB por Silvio Fabrykant